The Ring
La noche de ayer, aproximadamente a las 10:30, mi teléfono sonó, y como nadie contesta en mi casa porque... no se, pues levanté el teléfono, y llamé a mi mamá, seguramente debia de ser una de sus amigas, pues se han acostumbrado a hablar a esas horas; y molesto le dije al darle el teléfono "ya diles que no te hablen a estas horas, es muy tarde!".
De pronto la escucho decir "no mamá!, ya voy para allá!", y cuelga el telefono y cierra la puerta al estar diciendo "no respira".
Sabía que algo malo pasaba, y yo sabía de quien se trataba, y como había ido al yoga, y todavía tenia mi ropa de deportes puesta, solo me puse un pantalón encima y al salir mi mamá de su cuarto yo estaba listo para partir.
Entre "vete calmado, sino no vamos a llegar" y un silencio de esos que se posan sobre el ambiente para ser escuchados, me dice "No respira, y al parecer ya falleció".
Si, mi visabuela falleció; al llegar a la casa, mi abuelo no me dejó pasar, y mi madre entró y salió para ir al hospital, llegamos y nos dijeron que teniamos que llevarla, así que nos regresamos, avisamos a mi papá, "llama a una ambulancia" le dije a mi mamá, pero ni emergencias, ni locatel ni la cruz roja tenian unidades disponibles... no puedo creerlo. Al llegar a la cas, mi tio llegó, hecho rayo, entró y me dijo que la ambulancia venia en camino, de pronto la vi salir, su cuerpo casi amarillo, envuelto en una sabana, cargada por mi mamá y ayudada por su prima, la vi igual como la última vez que la vi, la última vez que le di un beso. Mi abuelita tras de ellos, con una cobija para arroparla, desesperada. Mi tio agarró el carro y en tres segundos estaba él y mi mamá en camino al hospital, la sirena de la ambulancia, perdida a lo lejos, sonaba mientras deciamos "lo mas seguro es que este perdida, y ya para qué la necesitamos".
Yo fui el encargado de llevar a mi abuelita al hospital, y mi tia nos acompañó, y la tardanza de nervios porque a mi abuelita se le olvida que ya había guardado el carnet en la bolsa, y lo seguía buscando diciendo que esperaba que no lo hubiera perdido.
En el trayecto, la historia, "había comido tan bién, hasta cerró su boquita ella sola; y cuando le fui a dar de cenar, estaba toda batida, yo la cambié, pero ella no me contestaba"
Asi llegamos al hospital, y yo los iba a esperar hasta que salieran.
Mi tia regresó "Tu tio chucho ya sabe que ya falleció, pero parece que no le han dicho a mamá lila, pero tu mamá esta con ella", y a esperar, mientras me comunicaba con mi papá y le comentaba que habia 10 personas y ninguna con crédito en el cel o bateria.
El tiempo pasó, de hecho pasó rápido, mientras platicaba con mi primo o con mi tia, y al final, después de ir a mi casa por el cel, hablé con Noelle, por casi 45 min, a él también le había pasado algo, o a su mamá mejor dicho, pero ya esta mejor, sin embargo Daysi había fallecido también.
Escuchar su voz fue reconfortante, y estuvimos platicando por un buen rato, al colgar y después de su ya conocida petición de favor (la que no puede faltar en él ni en los peores momentos), nos despedimos.
Escuchaba el radio, mientras veia a mi alredor, y a Lopez Obrador quien me prometia el bienestar para mi familia, recordando las palabras de mi primo "Bueno, no debes olvidar que vivimos en el Distrito" haciendo referencia a mi queja sobre las ambulancias.
Y mientras se hacía mas noche, y yo estaba mas cansado, tratando de mantenerme despierto para el momento en que me necesitaran; no pensaba en nada, mi ser ni mi cerebro querían pensar, solo dormir, dormir en un sueño de tranquilidad y acogimiento...
Creo que este verano si trajo muchas emociones, y como captar todas?
No me siento mal, sino muy serio, en pocos dias he sido muy feliz, y ahora, triste porque personas importantes para mi se han ido, sé que ella descanza en paz, y que, aunque al final de sus días se alienó de casi de todo mundo, me tranquiliza pensar que esta en un lugar mejor, pues se lo merece; y aunque esto me hace recordar historias como la de Oralia, quien hacía comentarios tajantes y burlescos de la muerte de su abuela, o de José, quien sufrió en carne propia las vicisitudes de cuidar a un ser querido; le guardaré luto a la matriarca de la familia Durán.